SpaceX avanza en pruebas del cohete Starship hacia reutilización

SpaceX lanza con éxito la cuarta prueba del cohete Starship

Elon Musk y su empresa SpaceX han logrado un hito importante en el desarrollo de su cohete Starship, con el éxito de la cuarta prueba de vuelo orbital que tuvo lugar el 5 de junio. En esta ocasión, el objetivo principal era evaluar el escudo térmico reutilizable de la segunda etapa, mientras el vehículo intentaba reentrar de manera segura en la atmósfera por primera vez. Este hito marca un paso significativo en el camino hacia la plena reutilización de los vehículos de lanzamiento, lo que podría reducir drásticamente los costes y aumentar la capacidad de carga en cada lanzamiento.

Un escudo térmico innovador en acción

El escudo térmico de la segunda etapa del Starship está compuesto por alrededor de 18.000 azulejos hexagonales de cerámica, diseñados para proteger la nave de las temperaturas extremas durante la reentrada en la atmósfera terrestre. Según Musk, uno de los mayores desafíos es la vulnerabilidad del sistema en general, ya que la pérdida de un solo azulejo podría desencadenar una catástrofe. Esta prueba fue crucial para determinar la eficacia y la resistencia del escudo térmico, así como para identificar posibles áreas de mejora en el diseño.

Un paso más hacia la reutilización total

SpaceX ha estado trabajando en el desarrollo de un nuevo sistema de suministro para los azulejos de alto rendimiento del escudo térmico, con el objetivo de fabricarlos a gran escala. La capacidad de reutilizar tanto la primera como la segunda etapa del cohete Starship es fundamental para lograr la plena reutilización y reducir significativamente los costes de lanzamiento. Con el éxito de esta prueba, SpaceX se acerca un paso más a su objetivo de hacer que el transporte espacial sea más accesible y eficiente.

Desafíos superados y lecciones aprendidas

A lo largo de las pruebas anteriores del Starship, SpaceX ha enfrentado desafíos significativos, incluidas explosiones en vuelo y desintegraciones antes de la reentrada en la atmósfera. Sin embargo, cada prueba ha proporcionado datos valiosos para los ingenieros y ha permitido a la empresa mejorar el diseño y la funcionalidad del cohete. A pesar de los contratiempos, cada misión ha llevado a SpaceX un paso más cerca de su objetivo final de aterrizar tanto la primera como la segunda etapa del cohete en su base de lanzamiento para su rápida reutilización.

Próximos pasos y desafíos regulatorios

Con el éxito de la cuarta prueba del Starship, SpaceX está más cerca de demostrar su capacidad para realizar reentradas controladas y aterrizajes suaves en el océano Índico. La empresa también está trabajando en el retorno del propulsor, llamado Super Heavy, a través de un aterrizaje en el océano. A medida que avanza en su programa de pruebas, SpaceX deberá obtener una licencia de lanzamiento comercial de la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos, lo que garantizará que cumple con todas las regulaciones y normativas para operar lanzamientos comerciales de forma segura y eficiente.