Tesla demandada por manejo inadecuado de desechos peligrosos en California

Tesla demandada por 25 condados de California por manejo inadecuado de desechos peligrosos

Tesla, el fabricante de automóviles eléctricos, se enfrenta a una demanda presentada por 25 condados de California, acusando a la compañía de manejar repetidamente desechos peligrosos de manera inadecuada en sus instalaciones en todo el estado. La demanda fue presentada después de que las conversaciones de conciliación fracasaran. La demanda, presentada en el Tribunal Superior del Condado de San Joaquín, afirma que Tesla etiquetó y desechó incorrectamente materiales como "baterías de plomo-ácido y otras baterías", pinturas, líquido de frenos, aerosoles, anticongelante, acetona, combustible diésel y más en sus instalaciones de producción y servicio en todo el estado. Tesla también supuestamente desechó los residuos de manera inadecuada, tanto en el lugar como en vertederos que no pueden aceptar desechos peligrosos. Los fiscales de distrito de cada condado buscan una orden judicial para obligar a Tesla a manejar adecuadamente los desechos en las instalaciones en el futuro, así como multas civiles. Según Reuters, Tesla podría enfrentar multas de hasta $70,000 por violación por día, según lo informado por primera vez en la demanda. En 2022, Tesla reveló en una presentación ante la Comisión de Valores y Bolsa que estaba siendo investigada por las oficinas de los fiscales de distrito de todo el estado de California por sus prácticas de gestión de residuos. La compañía dijo que "había implementado varias medidas correctivas, incluyendo capacitación y auditorías, y mejoras en sus programas de gestión de residuos en el lugar". En octubre de 2023, la compañía dijo que estaba en conversaciones de conciliación con esas oficinas de fiscales de distrito. La demanda sugiere que esas conversaciones terminaron sin una resolución. Los representantes de las oficinas de los fiscales de distrito de San Francisco y San Joaquín, que lideraron la investigación, no respondieron de inmediato a una pregunta sobre qué sucedió con las conversaciones de conciliación. Tesla ya ha sido examinada anteriormente por el impacto ambiental de su trabajo en California. La compañía llegó a un acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental en 2019 por una serie de violaciones en su fábrica de Fremont, California, una de las cuales incluía la etiquetación de desechos peligrosos. Esto resultó en una multa de $31,000 y un desembolso de $55,000 para cubrir el costo del equipo de respuesta de emergencia para los primeros en responder. Tesla también pagó una multa de $275,000 en 2022 por violar la Ley del Aire Limpio en la misma fábrica.

Consecuencias legales y medioambientales para Tesla

La demanda presentada por los 25 condados de California contra Tesla tiene importantes implicaciones legales y medioambientales para la compañía. Los fiscales de distrito están buscando una orden judicial para obligar a Tesla a manejar adecuadamente los desechos peligrosos en sus instalaciones en el futuro, así como multas civiles significativas.

Si la demanda tiene éxito, Tesla podría enfrentar multas de hasta $70,000 por violación por día. Dado que la compañía ha sido acusada de manejar repetidamente desechos peligrosos de manera inadecuada, el número de violaciones podría ser considerable, lo que resultaría en una suma total sustancial en multas.

Además de las consecuencias legales, Tesla también enfrenta críticas por su impacto ambiental en California. La compañía ya ha sido sancionada en el pasado por violaciones relacionadas con la gestión de desechos peligrosos y la contaminación del aire.

Esta demanda es otro golpe para la reputación de Tesla y podría afectar su imagen como una empresa comprometida con la sostenibilidad y el medio ambiente. La compañía ha sido ampliamente reconocida por su liderazgo en vehículos eléctricos, pero estas acusaciones de manejo inadecuado de desechos podrían socavar su credibilidad en esta área.

Es crucial que Tesla tome medidas rápidas y efectivas para abordar estas acusaciones y mejorar sus prácticas de gestión de desechos. De lo contrario, la compañía corre el riesgo de enfrentar sanciones más severas y dañar aún más su reputación tanto legal como ambientalmente.