Crecimiento en defensa tecnológica impulsa innovación en aeronaves VTOL

Auge de la financiación en tecnología de defensa

En el año 2024, la financiación destinada a empresas de tecnología de defensa ha experimentado un notable auge. Este crecimiento no es fortuito, sino que responde a un contexto de tensiones geopolíticas en aumento, avances significativos en inteligencia artificial (IA) y un mercado tecnológico más amplio que muestra signos de desaceleración. A medida que los inversores buscan nuevas áreas de crecimiento, el sector de la defensa se presenta como un terreno fértil para la inversión.

Entre las empresas que están buscando posicionarse en este prometedor mercado se encuentra Archer Aviation. La startup, que se especializa en la construcción de aeronaves de despegue y aterrizaje vertical (VTOL), ha dado un paso significativo al anunciar la creación de un nuevo programa de defensa, conocido como Archer Defense. Este movimiento ha sido acompañado de una impresionante recaudación de 430 millones de dólares en capital de inversores existentes como Stellantis y United, así como de nuevos inversores institucionales como Wellington Management y 2PointZero, una empresa de inversión de Abu Dhabi. Con esta nueva ronda de financiación, Archer ha elevado su total a cerca de 2.000 millones de dólares.

Asociación estratégica con Anduril

Uno de los aspectos más destacados de la nueva estrategia de Archer es su asociación exclusiva con el fabricante de armas Anduril. Ambas empresas han decidido colaborar en el desarrollo conjunto de una aeronave VTOL híbrida, que combinará energía eléctrica y de gas, destinada a aplicaciones críticas en defensa. Aunque los detalles específicos sobre la aeronave aún son escasos, Archer ha confirmado que se fabricará en su planta de Georgia, donde actualmente está trabajando con Stellantis para iniciar la producción en masa de sus aeronaves Midnight a gran escala, comenzando este mismo mes.

Archer planea lanzar redes de taxis aéreos con el modelo Midnight a partir de 2025. Adam Goldstein, fundador y CEO de Archer, ha explicado que la decisión de construir un vehículo híbrido responde a la necesidad de mejoras en rendimiento, velocidad, alcance y capacidad de carga, características esenciales para las operaciones de defensa. Al mismo tiempo, se mantienen las ventajas de un sistema eléctrico, como un perfil de ruido bajo y una firma térmica reducida.

La influencia de Anduril en la financiación de tecnología de defensa

Anduril se ha consolidado como un líder en la financiación de tecnología de defensa este año. La startup recaudó 1.500 millones de dólares en una ronda de financiación de serie F en agosto, con el objetivo de escalar la producción de sus sistemas militares autónomos. Con una reputación que desafía la percepción de que la producción de defensa avanza lentamente, Anduril, bajo la dirección de su fundador Palmer Luckey, busca convertirse en el próximo gran contratista de defensa estadounidense.

Luckey, conocido por haber fundado Oculus VR y venderla a Meta por 2.000 millones de dólares, ha establecido ambiciones audaces para su empresa. Anduril ya fabrica varios sistemas aéreos, incluidos drones asequibles que, según informes, han sido vendidos a Ucrania para ayudar en su lucha contra Rusia. Sin embargo, el software de Anduril, conocido como Lattice, será el componente principal de su colaboración con Archer.

Lattice: el corazón de la tecnología de defensa

Lattice es una plataforma de mando y control impulsada por IA que integra datos de diversos sensores para proporcionar una conciencia situacional en tiempo real. Esta tecnología ya está conectada a cientos de sistemas militares, permitiendo la automatización de la detección de amenazas, el seguimiento y la toma de decisiones. La capacidad de Lattice para gestionar el ciclo de "eliminar" amenazas es fundamental en el contexto militar actual.

Archer tiene previsto fabricar estas aeronaves en su planta de Georgia, donde está colaborando con Stellantis para iniciar la producción de su modelo Midnight a gran escala a finales de 2024. Goldstein ha confirmado que las aeronaves podrían ser armadas para aplicaciones militares, aunque también podrían emplearse en misiones de vigilancia, reconocimiento y rescate. En este sentido, Archer espera tener prototipos tempranos del vehículo de defensa listos para 2025.

Archer y Anduril pretenden acelerar la llegada al mercado de estas aeronaves "a una fracción del costo de alternativas más tradicionales".

Relación previa con el Departamento de Defensa

Archer ya ha estado involucrada en aplicaciones de defensa en el pasado. La startup se hizo pública en septiembre de 2021 mediante una fusión de adquisición de propósito especial y, el año pasado, formó un cuerpo asesor para apoyar su creciente relación con el Departamento de Defensa de Estados Unidos. En agosto, Archer entregó su primera aeronave Midnight a la Fuerza Aérea de EE.UU. para evaluación, en el marco de un contrato valorado en hasta 142 millones de dólares.

Goldstein ha señalado que este acuerdo es relativamente pequeño en comparación con los objetivos que Archer y Anduril persiguen con su asociación. Ambas empresas están apuntando a un "programa de registro potencial del Departamento de Defensa", un término que se refiere a programas de adquisición presupuestados con financiación garantizada a lo largo de un periodo determinado. Esto significa que tanto el Congreso como el Departamento de Defensa habrían aprobado una línea de presupuesto dedicada para estos programas.

El "Santo Grial" de los contratos del Departamento de Defensa

Una fuente familiarizada con los contratos gubernamentales ha descrito estos programas de registro como el "Santo Grial" de los contratos del Departamento de Defensa, ya que son muy difíciles de obtener. Normalmente, están reservados para contratistas de defensa establecidos y algunas startups bien financiadas que cuentan con tecnologías que el gobierno necesita de manera indiscutible.

Goldstein ha expresado que las aeronaves que Archer y Anduril están produciendo "se ajustan muy bien al marco DOGE de eliminación de costos" mientras se mantienen las capacidades requeridas. DOGE, o Departamento de Eficiencia Gubernamental, es un comité liderado por Elon Musk y Vivek Ramaswamy que asesorará al presidente electo Donald Trump sobre el gasto público.

Goldstein ha comentado sobre las conversaciones en torno a la innovación en el sector de defensa: “La nueva administración y Elon hablan sobre cómo nuevas empresas pueden salir al mercado y construir cosas nuevas, repensando totalmente la manera en que se han hecho las cosas, desafiando las normas y buscando soluciones desde una perspectiva de principios básicos, especialmente en sistemas no tripulados que cuestan mucho menos”.

Implicaciones para el futuro de la tecnología de defensa

El auge en la financiación de tecnología de defensa, combinado con las innovaciones en aeronaves VTOL y la integración de inteligencia artificial, sugiere que estamos ante una nueva era en la que las empresas emergentes están desafiando el statu quo en un sector tradicionalmente conservador. Las alianzas estratégicas, como la de Archer y Anduril, están sentando las bases para un futuro en el que la defensa no solo se verá beneficiada por la tecnología de vanguardia, sino que también se adaptará a las exigencias de un mundo cada vez más interconectado y lleno de desafíos.

La colaboración entre startups innovadoras y contratistas de defensa establecidos podría ser clave para redefinir cómo se diseñan y producen los sistemas de defensa. La capacidad de adaptarse rápidamente a las necesidades cambiantes del mercado y de los conflictos geopolíticos será crucial para el éxito de estas iniciativas.

A medida que el panorama global continúa evolucionando, el papel de la tecnología en la defensa se vuelve más crítico que nunca. Las empresas que logren equilibrar innovación y cumplimiento de las estrictas normativas del sector tendrán la oportunidad de posicionarse como líderes en este campo en expansión.