Ciberataque a T-Mobile genera preocupación por espionaje chino

Un nuevo ciberataque sacude a la industria de las telecomunicaciones

Un reciente ataque cibernético ha puesto en jaque a T-Mobile, una de las mayores operadoras de telefonía móvil en Estados Unidos. Este incidente se enmarca dentro de una serie de ataques dirigidos a empresas de telecomunicaciones tanto nacionales como internacionales, según informa el Wall Street Journal.

T-Mobile asegura que sus sistemas no han sufrido daños significativos.

La empresa ha declarado que está "monitoreando de cerca este ataque a nivel de industria", asegurando que hasta el momento no hay evidencias de que la información de los clientes haya sido comprometida. Sin embargo, la situación ha generado inquietud entre los usuarios, dado el historial reciente de ciberincidentes en la compañía.

Aumento de ciberamenazas en el sector

El portavoz de T-Mobile, que prefirió permanecer en el anonimato, no aclaró si la empresa cuenta con los recursos técnicos necesarios para determinar si se accedió a datos de clientes. Aunque no desmintió la información publicada por el medio, el silencio en torno a las capacidades de seguridad de la empresa ha alimentado las especulaciones.

La serie de ataques recientes ha afectado también a otras grandes operadoras como AT&T, Verizon y Lumen. Los hackers, asociados con el gobierno chino y conocidos como Salt Typhoon, habrían atacado sistemas de intercepción de comunicaciones, una práctica permitida por la legislación federal estadounidense desde hace tres décadas.

Advertencias de las autoridades

La situación ha llevado a la FBI y a la Agencia de Ciberseguridad de Estados Unidos (CISA) a emitir una advertencia a la industria, acusando a China de llevar a cabo una "amplia y significativa campaña de espionaje cibernético". Este esfuerzo estaría enfocado en obtener registros de llamadas y mensajes de texto de funcionarios estadounidenses de alto rango, incluyendo candidatos presidenciales.

Este ataque representa el noveno incidente conocido que afecta a T-Mobile en los últimos años.

La última brecha de seguridad en T-Mobile, que tuvo lugar en 2023, resultó en el robo de información personal de 37 millones de clientes. La creciente frecuencia de estos ataques ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de la infraestructura de telecomunicaciones en un contexto global cada vez más interconectado.